A partir de esta nueva parada, iniciamos un nuevo hilo: «Clásicos de contrabando». Aquí exploraremos bandas y artistas cuyos álbumes o canciones tuvieron gran resonancia en otros países, pero que en Colombia (o, quizá, dondequiera que leas esto) pasaron de largo. Tal vez porque sonaron poco o nada en la radio nacional, más allá de un par de temas sueltos. Hoy, gracias a la era digital, podemos redescubrirlos con facilidad, desenterrando esos sonidos que alguna vez quedaron atrapados en el limbo del dial.
Mediados de los años 1986, sonaba fuerte en la radio de Colombia «Your Love», de la banda británica The Outfield, conformada por Tony Lewis (voz y bajo), John Spinks (guitarra y composición) y Alan Jackman (batería) en Londres, Inglaterra, en 1984. Es uno de esos éxitos masivos que terminará por convertirse en un clásico no solo en el país sino en el mundo. Es de las primeras canciones en inglés de las que recuerdo le encontraba gusto siendo un niño, sin tener idea de cómo se llamaba ni, mucho menos, del nombre de la banda. Se quedaría en mi memoria y mi gusto hasta crecer y, por fin, tenerla en un disco doble recopilatorio de éxitos de pop y rock anglosajón para, luego, explorar más la banda a través de un CD de grandes éxitos Big Innings The Best of The Outfield, que un amigo me prestó para pasarlo a mp3.
Sin embargo, no sonará más música de ellos en el país, al menos no de manera comercial, tal vez «All the Love in the World» o «Say It Isn’t So», todos incluidos en su primer álbum Play Deep de 1985.
La voz de Tony, aguda y armoniosa, de la misma línea de su compatriotas Sting (pero cuando estaba en The Police, que registraba tonos más altos) o la de Jon Anderson de la banda Yes. A su vez, la voz de John en los coros complementa a la perfección la de Tony; ni qué decir de sus guitarras de arreglos atmosféricos. Por su parte, Alan aportaba una precisión reloj, y una composición de baterías que brillaba por simpleza sin caer en la pedantería. En otras palabras, la banda tenía su propia voz.
Es que The Outfield es uno de esos raros casos en los que, siendo original de Londres, Inglaterra, lograron éxito al otro lado del océano, en Estados Unidos, y no tanto en su tierra natal. Sólo de Play Deep vendieron 3 millones de unidades (disco doble de platino), gracias, en buena parte, a «Your Love». De otro lado, según la información disponible, no logró posicionarse en las listas británicas ni obtuvo certificaciones de ventas significativas en su país de origen.
El sonido que se producía y consumía con fuerza en el Reino Unido en esa época estaba muy orientado al new wave, basado principalmente en sintetizadores, mientras que The Outfield, se apoyaba más en guitarras atrapantes y letras pegajosas, más cercanas al estadounidense y bandas como Journey, Boston o REO Speedwagon, entre otras.
Acá, es bueno señalar un refuerzo anecdótico. Tengo un amigo en Facebook, Ashley Beeching, quién es inglés, muy amante de la música, además también canta y tiene su banda. Se me ocurrió consultarle por The Outfield mientras recopilaba la información para el presente escrito. A pesar de las evidencias, me parecía sorprendente que semejante banda no fuera reconocida en su propio país. La respuesta de Ashley y su punto de vista me parecieron tan significativos que quiero compartirlos con ustedes, (con la aprobación previa de él):
«Es extraño, amigo. ¡Justo el otro día estaba hablando de estos tipos con un amigo!
Debo confesar que, aunque esa fue mi época, nunca había oído hablar de ellos hasta que Google me mostró un artículo sobre la banda.
No creo que hayan tenido mucho impacto por aquí, aunque, al escucharlos, noto ciertas similitudes con Tears For Fears y Mike and the Mechanics, así que entiendo por qué fueron bien recibidos en otros lugares.
También me sorprendió lo elaborados que eran algunos de sus videos musicales para la época. ¡Así que debieron ser bastante grandes para justificar ese nivel de producción!»
Cabe anotar que lo que menciona Ashley con respecto a la calidad de sus videos es acertado. Es más, como dato curioso, tres de ellos («All the Love in the World», «Everytime You Cry» y «No Surrender») fueron dirigidos por el entonces director veinteañero novato David Fincher, quien se convertiría en uno de los directores más importantes de la historia, con películas como Seven, El club de la pelea, El curioso caso de Benjamin Button, Desaparecida, entre otras.
Con los álbumes subsiguientes como Bangin’ (1987) y Voices of Babylon (1989), que incluyeron sencillos como «Since You’ve Been Gone» y «Voices of Babylon», respectivamente, The Outfield mantuvo un sonido fiel a sus raíces, pero, tras la llegada de los 90 y el ascenso del grunge y el britpop, su estilo empezó a perder relevancia en las listas, tal como sucedió con otro sinfín de bandas. En dicha década, ya sin el baterista Alan Jackman, publicaron dos álbumes, Diamond Days (1990), Rockeye (1992), obtuvieron poca resonancia, incluso en Estados Unidos. A título personal, una de mis canciones favoritas de la banda se encuentra en este último álbum:
Con el pasar de los años, el éxito la banda se fue diluyendo, aunque continuaron realizando conciertos en pequeños recintos y bares. Publicaron dos álbumes más durante los 90: It Ain’t Over (1998) y Extra Innings (1999), éste último contiene las misma canciones del primero más otras más. Ambos álbumes cerraron la década sin pena ni gloria.
En 2006 publicaron el trabajo Any Time Now, con coqueteos a su sonido clásico, con ningún éxito comercial. Destaca una canción con el guitarrista John Spinks en la voz principal, una rareza en la banda:
Para 2009, se reunieron con el baterista original, Alan Jackman, después de 20 años, para grabar un nuevo álbum, Replay (2011). Suenan como si nunca hubiesen dejado de grabar, un estilo consistente outfieldiano de los años 80. De nuevo, no tuvo mayor relevancia en ventas.
En 2014, a los 60 años, muere el guitarrista John Spinks a causa de un cáncer de hígado, lo cual marcó el final de la banda. Tony Lewis comentaba en entrevista que dicho golpe lo sumió en depresión y se alejó de la música, pero que años más tarde, gracias a su esposa, se animó a tocar en vivo como solista e incluso grabar un álbum, Out of the Darkness, donde, de hecho, tocó todos los instrumento; en él logró captar por si solo la esencia de The Outfield. No obstante, el destino sinuoso no permitió a Tony recorrer más kilómetros en su vida y falleció también en 2020 a los 62 años, por causas que aún no han sido reveladas.
Fue un triste y relativo final prematuro para una gran banda.
Hubiese querido ser un adolescente en los 80 y haber corrido a la tienda de discos y haber comprado Play Deep, luego de que «Your Love» me hubiera volado la cabeza al escucharla en la radio por primera vez; hubiese querido haberme enamorado del resto del álbum como me sucedería después con una buena tanda de álbumes de diferentes artistas en los 90 con mis oídos de adolescente hambriento por nueva música; hubiese querido haber comprado el resto de sus álbumes los años subsiguientes y devorármelos de punta a punta; quisiera que ahora, al escuchar esas canciones, de manera inevitable saltara 40, 35, 30 años atrás a algún momento especial en mi vida conectado con ellas. En resumidas cuentas, quisiera que fuera un clásico que me conectara con experiencias pasadas, quisiera que no fuera un clásico de contrabando.
No, nada de eso sucedió. En cambio, ahora, décadas después, me encuentro escribiendo esto, permeando los oídos de mi esposa y de nuestra hija con las ondas sonoras de una banda que escuchamos en el carro y en casa. Finalmente, The Outfield se convertirá para nosotros como familia en un clásico como tal; estamos conectando recuerdos actuales con las canciones atemporales de esta lista que comparto con ustedes.
Argonautas, que disfruten The Outfield, que este clásico de contrabando también se convierta para ustedes en un clásico si excepciones. Nunca es tarde para una banda convertirse en un clásico.
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Nuevamente paso por acá maravillada con lo que leo, y agradecida porque eres tú la persona que me ha enseñado lo que es la buena música y quién ha contribuido a educar mis oidos para disfrutar con pasión de cada uno de estos discos.
Muchas gracias por tomarte tu tiempo para leer. Sé que no es tus temas habituales, pero aprecio mucho que quieras seguir aprendiendo. ♥♥